Asuntos propios de los cirujanos

 

Llegamos a la gráfica 12, misma que se refiere a los insumos como porcentaje de la producción total, es decir el valor bruto de la producción (VBP), por áreas generales para el año 2022.

En este caso vale la pena recordar que los insumos (consumo intermedio para el Sistema de Cuentas Nacionales) son aquellos bienes y servicios cuya finalidad es su utilización en la generación de nuevos productos, es decir, el valor que se otorga a la utilización de las materias primas, combustibles y otros en un proceso productivo.

Como se observa en la gráfica, la participación relativa promedio de los insumos utilizados en el sector cultural sobre el VBP es de 41.3%. Por arriba del promedio se ubican los medios audiovisuales con 51.6%; artesanías, 47.2%, y libros, impresiones y prensa con 45.4%. En el caso de las artesanías y el área editorial es innegable que por tratarse de bienes, estos son resultado de un proceso de transformación, mientras que, si bien los medios audiovisuales son un servicio, la producción de los programas que se difunden por diversos medios requiere de la participación de una gran variedad de productos como maquillaje, vestuario, iluminación, películas, alimentación, construcción de escenografías y mantenimiento de equipo, entre otras. Por eso es importante destacar que esta área tiene un gran impacto en la generación de empleos, debido a la amplia gama de proveedores que requiere.

Por debajo del promedio, con excepción de un área, se encuentran sólo actividades que proporcionan servicios como son: contenidos digitales e internet, 40.5%; música y conciertos, 40.2%; diseño y servicios creativos, 35.2%; artes escénicas y espectáculos, 27.6%; formación y difusión cultural, 25.1%, y patrimonio cultural y natural con 18.3%.

En el caso de las artes visuales y plásticas, con 20.1%, se presenta una situación muy curiosa que en alguna ocasión me comentó un contador público: el valor de los insumos es mínimo con relación al del producto final (observamos que una quinta parte). Por mencionar un ejemplo, un cuadro al óleo puede llega a tener un valor de 50 mil pesos o más, mientras que el artista pudo haber invertido un total de 2 mil pesos entre pinturas y pinceles. Algunos contadores prefieren no atender a los artistas plásticos porque es difícil identificar e incorporar deducibles en sus declaraciones fiscales.

Para finalizar, sólo queda recordar que la diferencia entre un bien y un servicio es el momento del consumo. Cuando se trata de un bien, éste se puede comprar en un momento para guardarlo y consumirlo en cualquier otro, mientras que el servicio se consume en el momento que se adquiere.

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