Bitácora de un cautiverio: Eje Turquía-Baja California

Ensenada. El mundo, tan grande, al mismo tiempo tan pequeño. Entre donde nací y donde vivo, hay 7100 millas, 10 horas de diferencia. Pero hay algo muy fuerte que me une: mis papás, quienes me dieron la vida y mis herman@s, con quienes compartí desde la panza de mamá hasta un pedazo de pan. Ahora tenemos una vida tan diferente, al mismo tiempo tan idéntica. Levantarse, preparar el desayuno, lavar trastes, cocinar, trastes, hora de cenar, trastes. Acostarse. Entre esas actividades principales, esta limpiar la casa, lavar manos, amar niños, regañar niños, checar niños, lavar manos. Ver noticias, ver programas de TV turca. Dormir. Y de corazón, pedir a Dios que esta cosa ya vaya lejos de mis seres queridos. (Hatice Coban Inowe).
Foto: Hatice Coban Inowe

Share the Post: