El inicio del año fue complicado para el sector cultural. Los atrasos en los pagos a los artistas y trabajadores culturales que participaron en los distintos eventos organizados por la Secretaría de Cultura (SC) y sus similares en los estados, había detonado una serie de protestas desde diciembre de 2019 que obligaron a los organismos administrativos de cada una de las dependencias a responder con prontitud a un cúmulo de compromisos pendientes que inexplicablemente no se habían procesado. Esa tarea continuó todo el mes de enero y parte de febrero, y a la fecha todavía nos encontramos notas aisladas de artistas que reclaman adeudos por parte de la secretaría.Infortunadamente no sabemos si los pagos efectuados a principios de año se efectuaron con cargo al presupuesto de 2019 o al de 2020. Tal vez la revisión de la Cuenta Pública del ejercicio pasado nos informe sobre las razones por las que el gobierno descuidó el cumplimiento de sus compromisos con la comunidad cultural por trabajos realizados.
Pero los problemas no terminaron, por el contrario, se complicaron. En febrero se registraron en territorio nacional los primeros casos de una enfermedad viral que fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud como pandemia, el coronavirus, lo cual obligó al gobierno federal a declarar una emergencia sanitaria que, como bien sabemos trastocó la vida social y económica del país. Así que, a partir de marzo fue necesario redefinir las prioridades del gasto público con el fin de cubrir las necesidades de recursos humanos, materiales y técnicos en materia de salud, tanto inmediatas como de mediano plazo, además de enfrentar los efectos de una recesión económica presente desde el segundo trimestre de 2019, que se acentuaron con las medidas de emergencia.
Dicha redefinición de prioridades afectó al presupuesto asignado a la SC de una manera poco severa ya que, como vamos a ver, las disminuciones aplicadas representan 8.5% del monto contemplado en el Presupuesto de Egresos de la Federación.
Los principales resultados
Lo que vamos a revisar a continuación son los datos sobre el ejercicio del gasto público de la SC contenidos en el Informe sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública (Informe trimestral) correspondiente a los primeros tres meses del presente ejercicio fiscal. Este documento fue elaborado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y entregado a la Cámara de Diputados, con base en lo estipulado en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y la Ley de Deuda Pública.
Al cierre del primer trimestre de 2020 la secretaría de Cultura ejerció un gasto de 2,963.8 millones de pesos, monto inferior en 3.5 % al presupuesto calendarizado para este período, y que equivale a 21.9% del presupuesto aprobado para el año.
Dichos recursos se canalizaron a través de 14 programas presupuestarios, de un total de 17 considerados en el presupuesto original, de lo cuales cuatro concentraron 84.2% del total, a saber: Desarrollo cultural, Protección y conservación del patrimonio cultural, Actividades de apoyo administrativo y Servicios educativos, culturales y artísticos.
Es importante comentar que a lo largo del año los programas presupuestarios son objeto de adecuaciones, tanto de los recursos asignados como de las metas, para lo cual se efectúan ampliaciones o reducciones mediante procesos administrativos bien definidos que dan mucha importancia a la justificación de esos cambios.
Durante el primer trimestre se efectuaron adecuaciones a 12 programas, lo que implicó ampliaciones por 147.4 millones de pesos y reducciones por 1,291.2 millones, de tal manera que se registró una disminución neta de 1,143.8 millones de pesos, que equivale a 8.5% del monto autorizado por la Cámara de Diputados. Los movimientos anteriores sólo afectaron al presupuesto calendarizado para el primer trimestre con una baja de 54.6 millones de pesos.
Con relación a las ampliaciones, sobresalen las efectuadas al programa de Protección y conservación del patrimonio cultural, por 45.6 millones, lo que permitió al INAH ampliar la cobertura de las labores de conservación en 10%, y al de Actividades de apoyo administrativo por 94.6 millones de pesos.
Por su parte, las reducciones afectaron a los programas de Servicios educativos, culturales y artísticos. 47.6 millones; Desarrollo Cultural, 92.6 millones; Apoyos a la Cultura, 150.0 millones, y Proyectos de infraestructura social del sector cultura, por 993.5 millones de pesos.
Tres programas se fueron en cero
Llama la atención que en el caso de tres programas no se ejercieron recursos, a pesar de que uno de ellos es considerado prioritario, a saber: Nacional de reconstrucción, Apoyos a la cultura y Proyectos de infraestructura social del sector cultura.
El Primero tiene una asignación de 333.3 millones de pesos, los cuales no fueron afectados por las reducciones. Sin embargo, en el calendario no se asignaron recursos para este primer trimestre, por lo cual el ejercicio del gasto se mantuvo en cero.
Por lo que se refiere al programa de Apoyos a la Cultura, invito al lector a recordar que éste se incorporó al Decreto del PEF 2020 para adicionar 150 millones de pesos al proyecto que presentó el Ejecutivo, ya que en su momento no se contaba con los elementos para ubicarlos en algún programa específico. De esta manera, los recursos se reasignaron en este primer trimestre mediante una reducción al programa y una ampliación en otro u otros. En este caso las adiciones a los programas de Protección y conservación del patrimonio cultural y de Actividades de apoyo administrativo, junto con otras de menor monto suman 147.4 millones de pesos que se acercan a los 150 millones originales.
El programa de Proyectos de Infraestructura social del sector cultura es el instrumento a través del cual se va a impulsar el Proyecto Complejo Cultural Chapultepec. Su asignación original se ubicó en 1,668.0 millones de pesos y en el transcurso del trimestre se aplicaron reducciones por 993.5 millones, con lo cual el presupuesto modificado ascendió a 674.5 millones de pesos, que equivale a una contracción de 59.5%. Con relación al ejercicio del primer trimestre, se tenía previsto erogar 180.0 millones de pesos, pero esos fondos no fueron utilizados.
Este último resultado no corresponde con el discurso del Titular del Ejecutivo en las semanas recientes. En su informe trimestral de principios de abril y en la conferencia de prensa matutina del día 22, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó sobre la entrega de ”…1,000 millones de pesos de presupuesto para el desarrollo del centro artístico cultural del bosque de Chapultepec”[1].
Debido a que no contamos con más información, sólo nos queda suponer que los recursos que se retiraron del programa se utilizaron para:
- Su reasignación a alguna de las actividades prioritarias en el marco de la emergencia sanitaria;
- Su reasignación a otra dependencia federal con más experiencia en proyectos de inversión;
- Canalizarlos a gobierno de la Ciudad de México con la finalidad de que asuman la responsabilidad del proyecto.
También cabe la posibilidad de que en un lapso de cinco días se hayan reincorporado al programa los recursos retirados y que se hayan ejercido.
Lo cierto es que por un lado tenemos un informe que nos muestra una disminución del presupuesto asignado a un proyecto que él mismo calificó como prioritario, con cero recursos ejercidos; mientras que, por el otro tenemos a un presidente que cinco días después del corte de este informe comentó que casi dos terceras partes del monto presupuestado de dicho proyecto ya se ejercieron. De todas maneras, bien sabemos que el presidente tiene otros datos.
[1] Gutiérrez Vicente, AMLO anuncia entrega de 1,000 millones de pesos para Los Pinos y Chapultepec, Diario el Economista, 23 de abril de 2020.
