Y continuamos con la Cuarta Jornada de la Cuenta Satélite de la Cultura. No debemos olvidar que en esta versión de 2022 se llevó a cabo el cambio de año base y se modificaron algunos criterios de registro, con lo cual se mejoró la cobertura y precisión de la información.
Uno de estos cambios consistió en calcular el valor de diversos agregados por entidad federativa y es por ello que les presentamos la gráfica Contribución del PIB de la cultura en la economía por entidad federativa, año 2022.
Como observamos en dicha gráfica, la mayor actividad cultural se concentra en la capital del país seguida por los estados de Jalisco, México y Nuevo León. En su conjunto estas entidades absorben 53.8% del total del producto interno bruto (PIB) cultural a nivel nacional. A este grupo le siguen en importancia los estados de Puebla, Oaxaca y Michoacán, cuya participación porcentual individual es superior a 3.5% y menor a 4.0%.
En orden descendente los estados de Chihuahua, Baja California, Guerrero, Guanajuato, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz contribuyen, cada una de ellos, con menos de 3.0% del PIB cultural hasta 2.1%.
Por su parte, las entidades federativas cuya contribución al valor agregado de la cultura se sitúa entre 1.7% y 1.0% son: Querétaro, Yucatán, Sinaloa, Morelos, Chiapas, Coahuila, Sonora, San Luis Potosí e Hidalgo.
En el caso de Tlaxcala, Zacatecas, Baja California Sur, Aguascalientes, Tabasco, Durango, Nayarit, Campeche y Colima su peso relativo propio es inferior a 1.0%. Es curioso que la ciudad elegida para albergar a la Secretaría de Cultura Federal se encuentre en uno de estos territorios.
La información que nos proporciona el INEGI no se concreta a las meras cifras, si el lector se echa un clavado en la plataforma del instituto podrá encontrar información más detallada, como por ejemplo la producción de las áreas generales en las que se subdivide la cuenta por cada uno de los estados. Ya platicaremos de esto.
Antonio Mier Hughes
Antonio Mier Hughes resuelve todas las aristas relacionadas con el análisis económico en el que se desempeña el sector cultural. Elabora estudios y soluciones para empresas culturales, para organizaciones de la sociedad civil y para dependencias de gobierno, en escenarios propios de la planeación estratégica, el diseño de políticas económicas, la creación y evaluación de indicadores así como en el análisis de las finanzas públicas. Es un docente a toda prueba con los emprendedores culturales.