La estrecha relación de la economía y la cultura “se teje a partir de una interdependencia donde los factores culturales contribuyen de forma significativa en el proceso de desarrollo de la actividad económica y donde a su vez, la economía forma parte del proceso cultural de generación e innovación de nuevos conocimientos” (Rish, 2005).
Desde 2009, año en que se conformó el Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura (Grecu), el trabajo se ha enfocado, a través de diversas acciones: conversatorios, conferencias, cursos y publicaciones, a impulsar el estudio y análisis para generar economía desde la cultura, involucrando a académicos y gestores culturales, así como a otros actores en estrecha relación con el sector. Es así como el Grecu ha puesto el tema de la cultura y la economía en muchas mesas de discusión.
Hoy en día, el sector cultural ha sido fuertemente afectado en cuanto a su economía a nivel mundial; y en nuestro país, llegamos a esta crisis de la peor manera, entre falta de pagos a creadores por parte de la Secretaría de Cultura federal, con incertidumbre ante programas ya existentes y sin normas claras de operación. En 2010, Alejandro González Hernández avizoraba como un reto, “que los emprendedores culturales se convirtieran en una fuerza innovadora capaz de generar crecimiento económico” (González, 2010), con un gran potencial que ningún otro sector podría igualar y que en esos momentos él consideraba que se encuentraba completamente virgen. Una década después podemos considerar como insuficiente lo que se ha avanzado en esta materia y llegamos a la crisis actual con emprendimientos culturales aún no consolidados.
El pronóstico no es alentador, ya no es cuestión de ideales sino de supervivencia; estamos ante una situación única e inimaginable. Es imperativo que se tomen mediadas y decisiones contundentes ante lo inmediato, la activación de la economía bajo otros estándares y quienes pueden impulsarlo son prinicipalmente los gobiernos de los tres órdenes.
Nosotros como consumidores culturales podemos apoyar a los artistas independientes, quienes a través de algunas plataformas están ofreciendo funciones para poderlas ver quedándonos en casa. No compren una entrada, compren dos o más, tal como si fueran al teatro.
Les comparto dos opciones de danza contemporánea: Teatro Polivalente con diferentes programas y VOYALTEATRO que en los siguientes fines de semana presenta El mundo de Luna con el grupo independiente Versus-danzateatro, creado en 2007 y dirigido por Amanda Morales.
Secretaría renovada
En mi aportación anterior a Paso Libre, Volver a la ¿normalidad?, hice referencia a la importancia de la gestión cultural como generadora de procesos de transformación y que sus campos de acción debieran abarcar mucho más que los propios del sector. En esta ocasión me referiré a esta misma apertura pero al interior de las dependencias culturales de gobierno.
Siempre he celebrado que una mujer sea elegida para un cargo público, no por cumplir con una “cuota de género”, sino por su capacidad. El gobernador de Colima, José Ignacio Peralta, el pasado 8 de junio designó como Secretaria de Cultura a la Dra. Oriana Zaret Gaytán Gómez, quien cuenta con una amplia trayectoria académica: es economista, Maestra en Comercio Exterior y con doctorado en Ciencias Sociales. Además de docente, fue Directora de la Facultad de Economía de la Universidad de Colima y actualmente es Presidenta con licencia de la Federación de Egresados de la misma universidad (FEUC). En el área de las artes, desde pequeña empezó a estudiar danza y durante varios años formó parte del cuerpo de bailarines del Ballet Folklórico de la Universidad de Colima, dirigido por el Mtro. Rafael Zamarripa, con el que tuvo opotunidad de presentarse en diversos escenarios de México y el extranjero.
En lo personal me llama la atención su tesis doctoral, Respuestas colectivas y solidarias de la Sociedad Cooperativa de Salineros de Colima a las políticas económicas del Estado corporativo y neoliberal dentro de la región de Cuyutlán, Colima (1925-2017), que encuentra un balance entre la economía y las ciencias sociales. Las Salinas de Cuyutlán son para Colima un símbolo cultural, histórico y económico de gran importancia. Su investigación, basada en entrevistas realizadas a los salineros, rescata el proceso de la creación y consolidación de la cooperativa, la estructura de la misma y de las familias a cargo de la producción, con base a una economía social y solidaria. Su trabajo de campo le permitió durante cinco años estar en relación constante con ellos, vivir sus festividades y documentar también el trabajo primordial que realizan las mujeres.
Quiero hacer mención de otro importante economista que ha impulsado de manera significativa el arte y la cultura en Colima: el Licenciado Ángel Mario Martínez Torres, quien además de otros cargos, fue Director de Extensión Universitaria y de Difusión Cultural de la Universidad de Colima; contó con la confianza y apoyo de ocho rectores entre los años sesenta y la primera década de este siglo. El licenciado Martínez modestamente se identifica como “facilitador” pero es a quien debemos la gestión de grandes logros culturales en la universidad, entre los que destacan: la creación del Instituto Universitario de Bellas Artes, la conformación de muchos grupos artísticos e incluso la invitación que hizo al Maestro Rafael Zamarripa para que se hiciera cargo del Ballet Folklórico el cual este año cumple 37 años con él al frente.
Celebro la actual designación en cultura de una economista. Sin duda, serán muchas las aportaciones que la Dra. Gaytán pueda dar al sector cultural.
Hasta el próximo Vuelo del ticús.
mfruvalcaba@gmail.com
Bibliografía
González Hernández, A. (2010). Emprendedores culturales: una oportunidad todavía no aprovechada en México. En E. Cruz Vázquez, Economía Cultural para Emprendedores, perspectivas. México: UAM-UANL.
Rish Lener, E. (2005). El valor de la cultura en los procesos de desarrollo urbano sustentable. Cataluña, España.
Marcela Flores Ruvalcaba
Bailarina, gestora cultural, docente con especialidad en danza contemporánea; empresaria y productora cultural. Miembro del Seminario de Cultura Mexicana Corresponsalía Colima, donde forma parte de la mesa directiva. Maestra en Promoción y Desarrollo Cultural, licenciada en Artes Escénicas y egresada de la Escuela Nacional de Danza Contemporánea del INBAL. Fue docente del Instituto Universitario de Bellas Artes de la Universidad de Colima y de varios grupos de danza y teatro de Colima y la CDMX. Productora de obras de teatro, danza y música. Colabora como dictaminadora de artículos para la revista Estudios sobre las Culturas Contemporáneas de la Universidad de Colima.